Iniciación
Jan 26, 2022
Cerró los ojos y se permitió ser conducida ante el altar.
No era un sacrificio de sangre. Más bien, el cumplimiento de una promesa.
Abriendo los ojos ante una conexión con el más allá.
Vulnerable, y al mismo tiempo, dueña de sí misma.
Sin trampa alguna. Sabía que no tenía caso mentir.
Su cuerpo estaba vibrando a una frecuencia distinta.
Se había acercado al mismo cielo.